La utilización de las hojas de cilantro en la cocina es de sobra conocida, pero las propiedades culinarias y terapéuticas de las semillas de cilantro lo son mucho menos. El cilantro (Coriandrum sativum), también llamado culantro o perejil chino, es una planta anual de la familia de las Umbelíferas (Apiaceae).
Las semillas de cilantro son ampliamente utilizadas en la cocina tradicional por su poder conservante, por su sabor dulce y ligero, y por su aroma (cítrico, como cáscara de naranja). Por ello es muy utilizado en las cocinas árabes y asiáticas, formando parte de numerosas mezclas de condimentos como el Curry o el ras al-hanout marroquí.
Como todas las especias y plantas aromáticas, el cilantro posee además propiedades beneficiosas para el organismo. Contiene hasta un 20% de aceites esenciales que actúan sobre el sistema digestivo facilitando la digestión y aliviando el estreñimiento, también es eficaz contra cólicos y flatulencias.
Una infusión preparada con frutos ligeramente machacados tiene propiedades antifúngicas y antisépticas, estimula la producción de leche materna, es un buen expectorante, disminuye la absorción del colesterol “malo” y los triglicéridos (LDL), es una buena fuente de antioxidantes, es diurética y depurativa y mejora los síntomas causados por cambios hormonales (menstruación). Fortalece nuestro sistema inmunológico, mitiga la insuficiencia hepática y en algunos lugares la utilizan para tratar la ansiedad y el insomnio.